El Paracaídas

Bueno...en lo primero que escribí se me fue un poco el tema que quería... quiero decir, que en realidad éste debía ser el tema del primer "artículo" o como se llame en la jerga.

La cuestión es que esta Semana Santa, que bueno, de Santa cada vez tiene menos, hay que ver como se pierden las costumbres... Mira que tengo fotos yo de pequeño con el pelo repeinado al estilo de antaño para el domingo de ramos, que más que peinado parecía que un camello de carreras, agotado y babeando, te hubiera confundido con un Chupa-Chup y con un lengüetazo te hubiera colocado los pelos en su sitio. No se si os habéis hecho a la idea de a que me refiero, pero es que yo es una cosa que tengo muy metida en la cabeza, llámame obsesivo. Para facilitaros el trabajo, he encontrado a un sujeto, estereotipo idóneo de lo que comentaba:Seguir leyendo...

Al caso, que la Semana Santa cada vez peor, pero bueno tampoco es que antes fuera la Apoteosis. Royo:

- ¡E tio! vamos a tajarnos! que ha llegado la Semana Santa!

- ¡¡Vaya!! Locura colectiva!! Hay que partir la pana con la Virgen de los Desamparados!!

- ¡Como sabes! se ve que ahora le han metido debajo de la falda 4000 Wattios, ¡vaya rave nos vamos a pegar en el claustro!

La realidad, cruda realidad de la Semana Santa era ésta:

Trajes de "gala", el puto ramo y lo peor de todo, la misa... madre mía, que día ese. Aún se hacía llevadero si tenías suerte y se curraban una palma con el rosario de caramelitos, sabían como comprarnos... incluso los más ateos eran vulnerables a esta oferta, todo dependía del tamaño del rosario, cuanto más revelde, más grande y listos. De hecho, un colega sigue yendo a Ramos por eso, pero ahora las pastillitas del rosario ya no son de azúcar, y no veas como pasa la Semana, no duerme el pavo, ni un segundo, no se de que coño serán, mi madre dice que de Coca-Cola, pero no me convence.

Al caso, que esta Semana Santa me he tirado en paracaídas, no veas, no es lo que yo me esperaba, cogí el pack completo y me hicieron un DVD, son cosas para tener, al menos recordarlo una vez estás en el suelo, o tener unas imágenes con las que tu familia pueda negociar con Impacto TV y se ganen unos durillos, aquí está el DVD, como os podéis imaginar, le he pillado pánico a las alturas... :

No, ahora en serio, fue una experiencia. La cosa no empezó bien, os prometo que el piloto de mi avión aterrizaba primero con las ruedas de delante y luego apoyaba las de atrás, lo que no me daba mucha confianza, por mucho que fuera de la nueva escuela. Cuando me presentaron al instructor que se iba a tirar conmigo, o yo con él, mejor dicho:

- ¡Hola muy buenas! soy Adrián

- ¡Muy buenas! soy Víctor, te vas a tirar conmigo, pero tranquilo, llevo 15 años tirándome en paracaídas, tengo el récord de caída libre, experiencia mil, bla bla bla...

Ésto es lo que debería haber sido una tranquilizadora conversación con mi instructor, pero realmente fue ésta:

- Hola muy buenas! soy Adrián

- ¿Qué? perdona, es que me he metido 4 cervezas sin haber desayunado y voy un poco ciego.

- Ja,ja. Bueno... y cuántos años hace que te tiras?

- ¡Que va tío! es el primer día, me he sacado el título por internet. Has desayunado fuerte no? para no marearte...

- ¡Que dices! si me dijeron que no comiera mucho, que lo potaría.

(¡Mierda! fui otra vez víctima del peor enemigo del hombre, el "me dijeron", ¿cuantas veces hemos sido víctimas de ésto? ¿quien coño te dijo eso? nadie logra recordarlo jamás, como mucho se llega a un punto en el que, me lo dijo tal que se lo habían dicho. Pero hay un momento en el que ya es imposible seguir la pista. El resultado siempre es el mismo, nunca las cosas son como "te dijeron", pero volvemos y volvemos a caer. Yo creo que en realidad hay una persona, que concentra y crea todos estos rumores, alguien que desde su despacho los crea y los difunde, haciendo que todo el mundo gire a sus pies. Él es nuestro dios)

- ¿Quien te dijo eso?

- Mi madre...

- Y, ¿quien se lo dijo a ella?

- No sé...

(Se demuestra)

Ésta fue la conversación real. Grande. Pero bueno, que me fui para el avión, me decidí a montarme en él y empezamos a subir, subir, subir. Y entonces se me formuló en la cabeza una gran pregunta, mirando hacia abajo, dije: para que coño quiero el casco?, es ser muy optimista el creer que si no se abre el paracaídas cayendo de 4000 metros, un puto casco de la obra te vaya a librar de lesiones serias, en realidad, ya es optimista el pensar que cayendo de 4000 metros vayas a tener lesiones serias. Pero bueno, el avión siguió subiendo y subiendo. Me empezó a hacer efecto la falta de oxígeno, y empecé a delirar, tarareando esta canción, que en ese momento me parecía un temazo de culto:

Grande Pajares(aunque no os lo creáis, es suya la canción)!

La cosa está en que ahí no se detuvo el ascenso en el avión, seguimos elevándonos más y más, trastornados irracionalmente, cegados totalmente por el subidón de adrenalina, queríamos ser más que nadie, saltar más arriba que ninguno. Y desde ahí fue el salto, como se ve claramente en la fotografía:

Así fue el salto! Hay que reconocer que cuando llegué al suelo iba un poco mareado...pero es lo que tiene no haber desayunado...